Madrid, capital de España, está considerada capital de la alegría y de la amabilidad. Su ambiente, a veces repleto de actividades culturales, festivas y feriales, hacen de esta villa una ciudad variopinta y simpática.
Su fuerte personalidad hace de Madrid una ciudad inolvidable y tan acogedora que resulta francamente dificil olvidarla. Turísticamente ofrece cuanto se desee-- arte, historia, ambiente y una gran oferta hotelera--, tanto en la ciudad como en el otras ciudades próximas: Podemos destacar: Toledo, Segovia, Aranjuez, El Escorial, etc,
Símbolo del progreso para el cambio de siglo, la Gran Vía fué proyectada como gran arteria cosmopolita de la ciudad moderna a la que se sacrificaron buen número de tradicionales callejas del viejo casco urbano. El interés con que los madrileños siguieron esta reforma quedaría castizamente reflejado en una de las más populares zarzuelas. "La Gran Via"(1896) de Chueca y Pérez Gonzalez.
Dicen, y con razón, que Madrid es único, pero a la vez diferente. Diferente en separar al Madrid de los Austrias, también llamados "Felipes", lleno de románticismo, o diferenciar entre el Madrid de los Borbones y el Madrid del Rastro, de pintores, escritores y artistico en general. Hay muchas clases de Madrid, pero todos llegan a tu corazón, especialmente cuando has vivido, como yo, la intensa búsqueda de sus cualidades como centro cultural, politico, social e incluso ambiental.
Madrid cuenta con renombrados establecimientos de rango mundial y modernos restaurantes en los que se puede degustar los principales platos de la cocina internacional. Cuenta además con numerosos restaurantes que pone al alcance del cliente las especialidades más sabrosas de la cocina tradicional española, desde una paella valencias hasta una fabada asturiana o un típico gazpacho andaluz.
Madrid cuenta en su cocina peculiar, en la que se incluyen platos tan conocidos como el célebre cocido madrileño. Los callos a la madrileña es otras especialidad culinaria de la capital de España. Tambien tienen merecida aceptación el cochinillo asado, los bocatas de calamares, los esparragos trigueros y las fresas de Aranjuez. !casi ná!
Los platos más característicos de los alrededores de Madrid, a veces muy semejantes entre ellos, tienen el común denominador de los asados, que son tipicos de toda la zona centro. Así, el cochinillo asado de Segovia y Arévalo; el cordero asado de Segovia y Sepúlveda, y el cordero al horno de Cuenca. Luego hay platos típicos en cada lugar, como la perdiz estofada, la liebre a la cazadora y la tortilla de patatas, de Toledo; el "tiznao", el bacalao a la manchega, las perdices de Piedrabuena, el gazpacho manchego acompañado de los típicos "galianos", especie de pan pastoril en Ciudad Real; y el "morteruelo", la caldereta de cordero y la trucha al horno, en Cuenca; caldereta de cabrito, trucha a la molinera y cangrejos de rio, en Guadalajara; ternera del Valle de Amblés, sopa castellana y judias del Barco en Ávila; las truchas y judias de La Granja, en Segovia; el chorizo, cabrito frito, cangrejos y truchas del Ucero, de Soria.
Como postres, además de las mencionadas fresas de Aranjuez, hay que destacar los famosísimos mazapanes de Toledo, dulce de antigüa historia y esquisito paladar; los bartolillos de Madrid; la miel de la Alcarria y los bizcochos "borrachos", en la provincia de Guadalajar; mantequilla dulce, mantecadas y yemas de Almazán, en Soria.
Complemento indispensable de un buen menú son los vinos, que hay que escoger con especial cuidado según el plato de que se trate; importantes son los blancos de Horcajo de Santiago y Mota del Cuervo (Cuenca) y los de Nieva (Segovia); claretes de Arévalo (Ävila), Motilla del Palancar(Cuenca) y Arganda del Rey (Madrid), y los tintos de Valdepeñas(Ciudad Real), Méntrida y Yepes(Toledo), Cebreros y Montefrío(Ävila), San Martin de Valdeiglesias (Madrid)
PRD
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